Por excelencia las mariposas son un tatuaje que si bien son un diseño bonito puede pasar de lo adorable y sereno a ser algo muy sensual y atractivo, sobre todo si prestamos más atención en cuales lugares podrías intensificar este efecto para que una vez decidido puedas tatuartelo.
Los hombros es el lugar perfecto para aquella chicas sexys pero discretas, esta es una zona que denota femineidad, dulzura, delicadeza, si bien puede ser cubierta con los atuendo del diario se vería realmente espectacular en una noche de paseo con un top tipo strapless que luzcan con sutileza y en uno de ellos un par de mariposa que también puede ir acompañada de detalles florales, destellos, entre otros.
La región cercana a las caderas ya sea piernas o glúteos son las más usada en las chicas aunque, considerando que esta es una zona controversial el tatto no se orienta hacia lo grosero o de mal gusto, de hecho, sucede todo lo contrario ya que unas delicadas alas de mariposa le confiere a dicha zona un aspecto suave, pulcro y para nada grosero a la vista.
Para chicas más arriesgadas les recomiendo un lugar que sin duda es sensual, estoy hablando del espacio que queda entre los senos y que además te permite calcular que tanto deseas mostrar de la mariposa que llevas tatuada en ese lugar. Los espectadores tendrán un panorama muy reducido para observar lo cual les causara más intriga averiguar (no hay cosa sensual como el misterio premeditado), es un juego de incertidumbre por parte de la otra persona en el que tu terminas divirtiéndote y logrando tu cometido de llamar la atención.
Hay muchísimos lugares con los que puedes jugar, no debes dejarle toda la responsabilidad de seducción al tatuaje ya que también debe estar en ti, en tu manera de ser para que en realidad puedas lucirlo como es. Como tip extra tenemos las siguientes zonas corporales: atrás de la oreja, en las manos, en las costillas y en la espalda baja